Ay
mi Portugal querido…..Vuelvo con una receta Portuguesa: los bolos de arroz.
La
primera vez que fui con Paco a Portugal, en uno de los desayunos probamos los
“bolos de arroz”. Me quedé fascinada con el sabor: es como una magdalena pero con
harina de arroz, y la textura resulta diferente a nuestras tradicionales
magdalenas. Su forma también es especial: son más altitos y con azúcar por
encima (bueno, algunas magdalenas también tienen azúcar).
Así
que cuando me decidí a hacerlos en casa, lo primero que tuve que hacer fue
comprarme los moldes apropiados. Esto fue muy fácil: bazar que te crió (los
archi-conocidos “todo a un euro”). Y allí encontré unos moldes cilíndricos que
son en realidad para emplatar, pero que cubiertos con papel de hornear, hacen
la función perfecta de molde para los bolos de arroz. Y a un euro….
Y
luego hacerlos, pues súper sencillo, la verdad. Seguid leyendo….
Ingredientes (para 12 bolos de arroz)
300
gr. de azúcar
150
gr. de mantequilla a temperatura ambiente
25
gr. de levadura
Ralladura
de limón
300 gr. de harina de trigo
150
gr. de harina de arroz
6
huevos batidos y completar hasta un volumen total de 500 ml con leche
Se
mezcla el azúcar con la mantequilla reblandecida, la ralladura de limón y la
levadura. Se añade la mezcla de 6 huevos + leche (en total debe tener un
volumen de 500 ml) y se bate bien hasta lograr una consistencia cremosa.
Después se añaden las dos harinas hasta que se integre todo bien.
Se
llenan los moldes hasta los 2/3 de su capacidad y se meten al horno
(precalentado durante 15 minutos a 200ºC) durante 5 minutos. Después se baja el
horno a 170ºC y se hornean hasta que estén dorados. Cuando ya hayan subido
(pero antes de que empiecen a coger color), se abre un poco el horno y se echa
azúcar por encima a los bolos de arroz.
Y
aquí están!
Tengo
que decir que quedaron riquísimos! La tarde que los hice conté con un pinche de cocina muy especial, que dio buena cuenta de ellos según salieron del horno y los alabó muchísimo.
Antes
de hacerlos en casa, cada vez que íbamos a Portugal veníamos cargados con bolos
de arroz; pero ahora ya no tenemos que esperar a ir allí para comerlos. Qué
peligro para nuestra figura!!!
Bueno,
pues os dejo por ahora con mucha alegría (ya es viernes!!). Y si…tengo plan
para este fin de semana, uno chulo y especial. Ya os lo contaré…
Nos
vemos otra vez muy pronto, prometido!
Muchos
besos,
Natalia